domingo, junio 18, 2006

Diferencias sobre fútbol y gastronomía


Saviola


1. Si me dejara llevar por gustos gastronómicos la final sería entre Francia y México y, sin duda, apostaría dichoso por este último. Hace una semana tuve la fortuna de disfrutar una cena donde los chiles en nogada de Cuchi se llevaron nuevamente los honores de exigentes comensales. Así, marcado como estoy por la renovada grandeza mexicana de la mesa doméstica -por más Zidane o Henri que valgan-, no habrá tarte tatin de postre que me haga cambiar de adhesión futbolera y culinaria. Recuerdo ahora con deleite a Platini y también un inmejorable chateaubriand con salsa bearnesa disfrutado en Saint-Michel hace dos años. Pero eso no es suficiente para desplazar de mis preferencias al mole poblano y menos aún a Sor Juana Inés de la Cruz, la escritora que metió los mejores goles literarios contra la férrea defensa de la hegemonía colonial. Además, por Juan Villoro, mexicano y fanático del balón (ahijado casi de mi maestro Juan Nuño), apuesto siempre. Por eso digo: ¡Viva México!

2. Alejo Carpentier disfrutaba de la cocina francesa y también de la italiana, pero para comer completo no había –según él- nada como la española. Varias décadas de experiencia me permiten afirmar ahora que comparto plenamente su golosa confesión: España es, ¡qué duda cabe!, un paraíso gastronómico. Veo en este momento su juego perfecto contra Ucrania y abrigo la ilusión de que su fútbol adquiera, por fin, la segura excelencia de sus platos campesinos. Una tortilla de patatas, por favor, para gozar el triunfo sobre Túnez y adelantarme a los que siguen.

3. No debemos olvidar que Inglaterra también tiene algunos platos entrañables. Y si no los tuviera, se los inventaría o se los robaría a Francia o a La India. Lo cierto es que en materia de fútbol lucen bien los ingleses, pero no los apoyo. Me gustaría que perdieran. Ligo a Ecuador como primero de su grupo, para que Alemania se encargue de los ingleses y los deje fuera, como se debe. Ceviche y salchichas a la gloria.

4.Me gusta el bacalao y me gusta Pessoa. Pero no sé si Portugal es Figo o Pessoa...

5. Escribir sobre el mundial de fútbol es hacerlo también sobre la diversidad cultural. Hoy vi a japoneses contra croatas y a brasileños contra australianos. ¿Diálogo intercultural? No lo creo. No puede haber diálogo en medio de un espectáculo dónde sólo Ronaldinho es la noble excepción. Cuando hablo de “espectáculo” incluyo a los lamentables fanáticos de mi país, vestidos de verde-amarelo e ignorantes por completo de la poesía de Ledo Ivo.

6. Acabo de entender a los fanáticos venezolanos. Un vecino está emocionadísimo por el gol de Corea contra Francia. Es lógico. Tiene razón Bourdieu. La diferencia es cultural.

7. Espero el asado del miércoles 21. Respetaré el ritual gastronómico y le pediré a Cuchi que rememore a Juan Carlos Cadeira. Que todos huelan el asado. Que todos sepan que el romero le da un toque especial a la vinagreta de los gauchos y que el chimichurri que hace María Loyo es insuperable. Que como Bourdieu tiene razón, no hagamos mucha bulla aunque estemos ganando el mundial.

8. Bife de chorizo y malbec para rociarlo. Y aquí entre nos: ¡Viva Messi!

10 comentarios:

Sumito dijo...

¡Excelente post Biscuter!. Me encantaría alguna vez tener el honor de entrevistarte en mi programa de entrevistas en la radio ... si alguna vez vienes a Caracas por favor escríbeme e inventamos algo.

Guy Monod dijo...

El "fanático" venezolano es Vino Tinto por fuera, Polar Ice por dentro.

Tecnorrante dijo...

Sabio monod

Salud y mucho vino...

PD: El mundial es una excusa perfecta para celebrar cada triunfo: Trapiche Roble, cualquier Vinho verde, mucho Rioja (hoy en especial), Cabernet Sauvignon de la tierra del vencedor de turno, Malbecs, un buen Riesling de vez en cuando, Médocs por bojote, y pare de contar, pero no de beber...

Anónimo dijo...

Como no me gusta el fútbol, estoy con Tecnorrante: lo mejor es reunirse a ver el partidito, a ser posible con gente de simpática y agradable conversación y buen gusto en materia de vinos con los que celebrar adecuadamente los goles, me da igual de quién sean. Un mundial no es para menos.

Anónimo dijo...

Sumito, gracias por tu comentario y por tu invitación.

También tú estás estás invitado a la UNEY. Te llamaremos para acordar contigo el momento. O los momentos, pues será un honor estar en tu programa.

Un saludo

Sumito dijo...

Paseense por el blog http://oriolserra.blogspot.com que allí también Oriol hizo un relato futbolístico/gastronómico bien bueno

Oriol Serra dijo...

Biscuter y Sumito,
Estamos conectados !!!!!!

gracias a tu recomendacion biscuter me visita y saluda, me motiva a visitar su blog y encuentro la conexión mundialista.

Biscuter, te invito a que leas una referencia sobre Amarcord en mi blog... cuando como una hamburguesa "con todo" en la calle del hambre me siento como el muchacho soplando las tetas de la estanquera.

Si hablamos de cine y gastronomia, queria avanzaros que se está gestando un proyecto editorial precioso en España con implicación de profesionales de renombre que ha seleccionado 30 peliculas donde un elemento gastronomico es clave en la trama.. a partir de ahi os podeis imaginar la labor conceptual que se está desarrollando para adaptar sobre el plato el alma de dichas peliculas.

un gran abrazo,
Oriol

Biscuter dijo...

Oriol, visité tu blog nuevamente. ¡Qué buena la referencia a Amarcord!

El proyecto editorial que mencionas sobre cine y gastronomía es una idea formidable (y difícil). Estaré pendiente.

¿Sabes cuáles son las peliculas seleccionadas en ese proyecto?

Oriol Serra dijo...

Biscuter,
ahora puedes ver un particular pronóstico sobre el francia-portugal.

El proyecto me lo contó una persona que está participando desde la editorial. Por el momento vamos a mantener la sorpresa, ya falta poquito !!!!!!!!

a falta de concreciones, un par de pistas, piensa en el desayuno mas famoso de la historia del cine, o en aquel festin demoledor... asi hasta 30 peliculas

Biscuter dijo...

Ya. Tendré paciencia. Esperaremos diamantes y sopa de tortuga.