La salsa Isabelita de la signora Sandra es uno de
los mejores homenajes que alguien le haya hecho al ají dulce.
Cuando Sandra llegó a nuestro país descubrió ese
portento y con él elaboró la prodigiosa salsa que ofrecía en su maravilloso
bistró de Sabana Grande, por allá en los 80. El hecho, como ven, ocurrió
muchísimo antes de que se produjera el feliz reconocimiento público al ají
dulce, por parte del mundo gourmet. En la cocina de Sandra ya tenía su reino y
dialogaba con sabores de otra tierra. Se avenía, por ejemplo, con el pesto.
La Isabelita es una composición sabia y delicada
en la que nuestro perfumado y tradicional condimento es protagonista, pero
tiene un problema: crea adicción. Hoy Cuchi la preparó para dos viejos y buenos
amigos, con quienes recordamos al Da Sandra, un lugar que cerró hace
mucho tiempo, como tantas cosas en esta Venezuela transitoria.
1 comentario:
Tienen la receta?? Yo siempre ordenaba la Pasta Isabelita!!!
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