Claude Monet
Ocho
versos para sentir que la belleza del mundo nos toca cuando pasa. Son de
Alberti, que siempre me emociona con sus álamos. Habrá quien los encuentre
simples o banales. Yo los disfruto en este instante.
Pienso
como Housman: cuando se bebe un Barolo stravecchio
en Turín, para qué pensar en borgoñas nobles y lejanos.
Ahí
van estos enigmas, viejos dioses vegetales:
¿De quién es esa voz,
esas ramas que pasan sin
pararse?
De los álamos tienen
el tiemblo, y el silbido de
los sauces.
¿Adónde irán, perdidas,
cantando, ciegas, sin mirar
a nadie?
Van a la mar, al mar. Si no
volvieran,
es que quieren quedarse.
RAFAEL
ALBERTI
1 comentario:
Hace tiempo lo había leído. Me fui pensando. Hoy lo vuelvo a leer y sigue, tan fresco como esas "ramas que pasan sin pararse"...como una "varilla seca que florece de pronto al lado del agua que comienza su despertar"...
¿Por què estoy triste?...
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