jueves, abril 21, 2005

Preguntas retóricas sobre el gusto


Weston

A propósito de los comentarios suscitados por un artículo de Alberto Soria:

¿Todo vale en gastronomía?

¿Sobre gustos gastrónomicos no han escrito los autores?

¿No hay patrimonios gastronómicos preservables?

¿Es la impostura un valor gastronómico?

¿Además de una estética, no hay una ética gastronómica?

¿No podríamos decir, acaso, "nulla estetica sine etica"?


P.D: Aviso

¡Cuidado, el tipo del nitrógeno anda suelto!

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo no me preocuparía tanto de lo que no me gusta y le dedicaría más tiempo a lo que sí me interesa. No siempre es fácil, lo sé, pero tampoco tiene mucho sentido dedicarle tanto tiempo a Adriá y sus huestes si ese tipo de cocina no te interesa. La mayoría de la gente es mayorcita (aunque no por ello menos manipulable) y elige lo que quiere (o lo que le meten por los ojos) con libertad.

A mí particularmente me parece tan agradable disfrutar de un plato "tradicional" como de una deconstrucción o de una nueva textura, siempre y cuando me gusten, me produzcan satisfacción. Si además es novedoso, pues tiene cierto aliciente (un nuevo álbun de música siempre ofrece un grado extra de satisfacción las primeras veces que se escucha, aunque con el tiempo pueden quedar relegados al fondo del cajón)

Hablamos también de comida en:
http://www.lamargaritaseagita.com/index.php/weblog/C3/

Biscuter dijo...

Por fortuna, me ocupo sólo de lo que me interesa, incluido lo que no me gusta (pero que me interesa como fenómeno, como algo que existe, etc...). Claro que prefiero hablar más de lo que me gusta, ¿quién no?. De lo que me gusta me ocupo. De lo que no me gusta me pre-ocupo, sobre todo, si existe impostura y puro negocio de por medio.

Ojalá sea cierto lo que dices en relación con la libertad de escogencia.Yo tengo serias dudas al respecto. Ya muchos autores (y también la realidad) se han encargado de sustentar esas dudas frente a las avalanchas mediáticas, frente a las modas...

Por supuesto, no se me escapa que cuanto ha escrito Soria acerca del tema y cuanto he expresado yo en este blog, causa cierta incomodidad, tal vez alguna molestia. Pero... bueno, se trata de que no exista unanimidad, y sobre todo, de que no exista tanto vacío de crítica seria entre nosotros.

Visitaré tu página y estoy dispuesta a hablar contigo y con los asiduos a tu blog de las cosas que en realidad me gustan mucho.

Gracias por tu comentario que realmente me agradó y que me pareció muy pertinente.

Un saludo de

Biscuter

Anónimo dijo...

¡Qué fastidioso sería el mundo si nadie hiciera reparos o críticas y nos dedicáramos a alabar sólo lo que nos gusta!

Conocen segurmente el viejo test de "me gusta/no me gusta". Sería divertido que Biscuter nos regalara su lista.

Ciao.